MURPHY..NO TENDRAS NADA QUE VER, NO?

Como suelen decir, las desgracias vienen de tres en tres...

Primero: nuestras respectivas lesiones (húmero para uno y peroné para el otro), que de una forma u otra lo llevamos bastante bien, sin prisa pero sin pausa.
Segundo: después de empeñar un riñón para hacernos con una bici (muy normalita, no os penseis que es nada del otro mundo), resulta que entre los proveedores y los de la tienda no hacen la "o" con un canuto, y no se aclaran, asi que los dias de espera se alargan considerablemente sin que podamos rodar ( que falta nos hace).
Y tercero y no por ello menos importante: ¿por qué se rompen las cosas cuanto más necesarias son?..los pulsómetros de ambos se han ido al garete..asi que nos toca empeñar el otro riñon para comprar unos nuevos.
ESTO ES UNA RUINA!!!!!...pero cuanto disfrutamos...jejeje. ronin